Este blog, está especialmente dedicado a todas las personas que han hecho posible que el Club de Gimnasia Rítmica de Viña del Mar muestre la belleza de la gimnasia rítmica. Para esas personas que trabajan constantemente superando las horas de sueño, los costos monetarios, la paciencia infinita, el entrenamiento exigente, es decir, el esfuerzo humano que se requiere constantemente para que este grupo de entrenadoras, gimnastas y apoderados puedan llevar a cabo el trabajo que este Club de Gimnasia Rítmica necesita para funcionar.
Gracias a esas bellas gimnastas que entrenan con gran esfuerzo para deleitarnos con la belleza de esta disciplina. Y decirles que nunca se conformen con el esfuerzo que hacen, porque están hechas para entregar más de lo que ellas mismas creen. Este deporte es tan hermoso como ellas.
Gracias a las madres y a los padres que apoyan incondicionalmente a sus hijas participando con gran esfuerzo en las actividades necesarias para que el Club funcione lo mejor posible, y de esta forma sus hijas desarrollen su talento, pues gracias a su ayuda y amor es que estas mujercitas pueden alcanzar resultados, no sólo en campeonatos, si no más importante aún, en su diario vivir, ya que no solamente logran entrenar su cuerpo para mantenerlo saludable, sino también aprenden el importante valor del esfuerzo, del trabajo en equipo, de la disciplina, de concentrarse en un objetivo y cumplirlo, y todo esto les servirá durante toda su vida para crecer sanamente y ser grandes personas.
Pero especialmente, hay que agradecer, a las mujeres que llevan a cabo la parte más delicada de este trabajo, el ENTRENAMIENTO. El arte de la gimnasia rítmica está en tener una infinita paciencia para lograr objetivos, no hay resultados inmediatos, el proceso para alcanzar metas es de muchísimo trabajo, muchísimo esfuerzo, muchísimas ganas y muchísimo tiempo, y es por eso que hay que amar esta disciplina para practicarla, pero hay que amarla aún más para entrenarla. Es por eso que el infinito agradecimiento es para dos entrenadoras que con gran entereza han logrado que estas gimnastas día a día sean mejores, y sus padres estén orgullosos.
Infinitas gracias a las profesoras Mariana González y Camila Carrasco.
"El genio, es el infinito arte de trabajar con paciencia"
Thomas Carlyle (1795-1881)
Historiador, pensador y ensayista inglés
"El genio, es el infinito arte de trabajar con paciencia"
Thomas Carlyle (1795-1881)
Historiador, pensador y ensayista inglés
